¿Por qué se pierde casi la mitad de la energía comprada por las EDE?

¿Por qué se pierde casi la mitad de la energía comprada por las EDE?

El 41.7% de toda la energía comprada por las Empresas Distribuidoras de Electricidad (EDE) en los primeros cinco meses de 2025 se perdió, según el Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES). Detrás de esta cifra se esconde una realidad más profunda: el costo no lo asumen las empresas, sino los ciudadanos, a través de impuestos y subsidios estatales que mantienen a flote un sistema que arrastra décadas de ineficiencia.

¿Cómo se calculan esas pérdidas?

De acuerdo con el informe del Ministerio de Energía y Minas, entre enero y mayo las EDE compraron 7,895.5 GWh, pero 3,020.5 GWh nunca se facturaron, lo que equivale al 38.3% del total adquirido. A esto se suma un 3.4% de energía facturada pero no cobrada, lo que lleva la cifra final de pérdidas a 41.7%.

El CREES advierte que este escenario revela un círculo vicioso: las EDE continúan acumulando déficits que el Estado cubre con transferencias millonarias. Solo en el primer semestre de 2025, las distribuidoras han recibido RD$42,003 millones, equivalente al 51.2% del presupuesto anual asignado.

Subsidios que salen del bolsillo de todos

El problema no se limita a lo técnico. CREES sostiene que el modelo actual obliga a los contribuyentes a cubrir los costos de una mala gestión. “Las EDE requieren de una reforma que transforme su naturaleza de empresas públicas en entidades capaces de ofrecer un servicio más confiable y eficiente. Es pertinente que accionistas, que pongan su capital en juego, sean quienes asuman el riesgo inherente a este negocio, no los ciudadanos con sus impuestos”, explicó la entidad en un hilo publicado en X.

En otras palabras, el subsidio eléctrico, lejos de resolver el problema, perpetúa un esquema en el que la población paga dos veces: primero, con tarifas eléctricas ineficientes, y luego con sus impuestos.

Apagones y malestar social

La crisis financiera de las EDE se refleja directamente en la calidad del servicio. En los últimos días, los apagones prolongados —que en algunas zonas han alcanzado hasta 12 horas diarias sin luz— han desatado protestas en distintas provincias, con bloqueos de calles y quema de neumáticos.

La situación se agravó cuando la planta de Punta Catalina salió de operación la semana pasada, lo que, sumado a fallas en generadoras como Itabo, Los Mina y Siba Energy, provocó un déficit superior a los 600 megavatios.

El presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras (CUED), Celso Marranzini, reconoció en entrevista que el problema es estructural, aunque prometió que “a finales de este año, el problema de los apagones estará subsanado completamente”.

¿Reforma o parche?

La pregunta clave es si la crisis del sistema eléctrico se resolverá con más subsidios o con una transformación de fondo. CREES propone que las EDE sean gestionadas como empresas privadas con accionistas que asuman riesgos, mientras que el Estado se limite a regular y garantizar la competencia.

Lo cierto es que, mientras persista un modelo basado en pérdidas técnicas y financieras cubiertas con dinero público, la electricidad en República Dominicana seguirá siendo un problema recurrente que afecta no solo la economía de las familias, sino también la competitividad del país.

Te podría interesar: Sube 2.5% costo de compra de energía en RD pese a menor consumo en 2025

Etiquetas