¿Por qué la frontera aporta tan pocas empresas exportadoras?

¿Por qué la frontera aporta tan pocas empresas exportadoras?

El peso de la zona fronteriza en el tejido exportador dominicano volvió a ser reducido en 2024. Aunque la proporción de empresas exportadoras del territorio se ha mantenido estable (entre 1.3 % y 1.6 % del total nacional) la cantidad absoluta cayó un 32 % respecto al año anterior. La reducción confirma una tendencia estructural: la frontera participa poco en las exportaciones y lo hace a través de actividades de baja transformación productiva.

La información proviene de la base de datos Perfil de Empresas Exportadoras de la Oficina Nacional de Estadística (2019-2024), procesada por el Monitor de la Frontera del Ministerio de Hacienda y Economía. Dado que no todos los años contienen datos para las provincias fronterizas, los resultados se presentan de manera agregada para evitar distorsiones y garantizar comparabilidad con el resto del país.

Un territorio con poca diversificación exportadora

En 2024, las empresas exportadoras de la zona fronteriza se concentraron en Manufactura (35.3 %), Agropecuaria (32.4 %) y Comercio (26.5 %). Esta composición difiere significativamente del resto del país, donde la actividad agropecuaria tiene mucho menor peso (5.1 %) y los servicios alcanzan 20.1 %, un sector con mayor valor agregado.

El informe explica que este comportamiento refleja una base exportadora anclada en actividades primarias. “La especialización en productos agrícolas es coherente con la estructura empresarial del territorio”, indica el documento. A nivel regional, los datos de CEPAL también respaldan esta tendencia: aunque los servicios representan más del 65 % del PIB y el empleo de América Latina, solo aportan el 14.2 % de sus exportaciones.

Empresas pequeñas, pero con presencia de firmas grandes

El análisis por tamaño empresarial muestra que un 33.3 % de las empresas exportadoras fronterizas tiene entre 1 y 10 empleados, proporción similar al promedio nacional. Sin embargo, la zona fronteriza registra una mayor presencia relativa de empresas grandes: 26.7 % tiene más de 150 empleados, frente al 18.2 % en el resto del país.

Las empresas medianas (un segmento considerado clave para la diversificación productiva) representan apenas 13.3 % en la zona, por debajo del 17.4 % nacional. El Monitor de la Frontera ha documentado previamente que las mipymes constituyen más del 98 % del tejido empresarial del territorio y que la mayoría son microempresas con bajo nivel de capitalización, alta informalidad y dificultades para acceder a financiamiento o internacionalización.

Qué exporta la frontera

El patrón productivo se refleja directamente en la composición de los bienes exportados en 2024:

  • Las empresas agropecuarias enviaron principalmente frutos comestibles y melones (78.4 %).
  • Las empresas de comercio se concentraron en legumbres, plantas, raíces y tubérculos (32.0 %).
  • Las manufactureras exportaron preparaciones de legumbres u hortalizas (52.8 %).
  • Las empresas de servicios estuvieron orientadas a textiles confeccionados (87.0 %).

El predominio de productos primarios o con baja transformación limita el valor agregado y expone al territorio a riesgos externos como clima, disponibilidad de agua o variación de precios internacionales.

¿Puede la frontera diversificar su oferta exportadora?

La literatura económica sugiere que la diversificación reduce la vulnerabilidad y fortalece el crecimiento. El FMI sostiene que ampliar la variedad de productos exportados “mejora la estabilidad y las oportunidades de expansión, especialmente en economías pequeñas”. En el caso de la zona fronteriza, el reto principal es la transición hacia actividades con mayor contenido tecnológico, mayor procesamiento y cadenas de valor más complejas.