Santo Domingo. Las pruebas de adopaje aplicadas por el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) revelaron que, además de detectar 37 casos preliminarmente positivos al consumo de sustancias prohibidas, cientos de los evaluados presentan condiciones médicas como hipertensión y diabetes que podrían comprometer su capacidad para conducir de forma segura.

Entre diciembre de 2024 y julio de 2025, Intrant realizó 2,456 pruebas de dopaje y evaluaciones clínicas a choferes y motociclistas del transporte público, interurbano y de carga en todo el país.

Los operativos se desarrollaron en puntos estratégicos de ciudades como Santo Domingo, Higüey, La Romana, San Cristóbal, Haina, Villa Altagracia, Bonao, La Vega y Punta Cana, alcanzando a 1,680 choferes de rutas urbanas e interurbanas, 520 motociclistas y 256 conductores de carga.

Resultados y medidas correctivas

De las pruebas, 37 arrojaron resultados preliminares positivos a sustancias prohibidas, por lo que se procedió a la retención preventiva de las licencias y a la citación formal de los conductores, quienes deberán someterse a evaluaciones confirmatorias en laboratorios autorizados, conforme a la Ley 63-17.

Hallazgos médicos relevantes

Las evaluaciones clínicas revelaron:

            •         153 casos confirmados de hipertensión.

            •         131 casos de diabetes (algunos en estado crítico).

            •         38 casos de hiperglucemia.

            •         123 posibles casos adicionales de hipertensión.

            •         92 posibles casos de diabetes.

            •         1 conductor en condición de hemodiálisis.

Todos fueron referidos a centros médicos para recibir atención especializada.

Una estrategia nacional de prevención

El Intrant afirmó que estos operativos forman parte de un plan integral para reducir los siniestros viales mediante la detección temprana de riesgos y la promoción de hábitos saludables entre los operadores del transporte.