Santo Domingo. La influenza A H3N2, una de las variantes de gripe estacional más conocidas y monitoreadas a nivel mundial, vuelve a colocarse en el centro de la atención sanitaria ante reportes de circulación activa en República Dominicana.

Aunque se trata de un virus conocido, la aparición de una nueva variante, identificada como subclado “K”, ha provocado un aumento significativo de contagios en Europa y otras regiones, encendiendo las alertas de cara a las festividades navideñas, período caracterizado por una alta movilidad de personas y reuniones familiares.

A diferencia de la COVID-19, la influenza H3N2 no es un virus nuevo. Forma parte de los patógenos respiratorios que circulan cada año y para los cuales existen mecanismos de vigilancia epidemiológica, vacunas estacionales y protocolos de atención ya establecidos. Sin embargo, su capacidad de mutación obliga a las autoridades sanitarias a mantenerse en constante observación.

Una variante que se adelanta a la temporada

Este año, la gripe ha mostrado un comportamiento inusual. Países como Japón, Australia y el Reino Unido han registrado picos de contagio antes de lo habitual, una señal que históricamente ha servido como advertencia temprana para otras regiones.

En Europa, la circulación del subclado K del virus H3N2 ha provocado récords de casos, presionando los sistemas de salud, especialmente al coincidir con la circulación del virus respiratorio sincitial (VRS) y el descenso del personal hospitalario durante las festividades.

La propagación anticipada ha generado preocupación en Estados Unidos y América Latina, donde se observa con atención el comportamiento del virus de cara a los meses de mayor incidencia.

Síntomas intensos, pero evolución generalmente favorable

La influenza A H3N2 suele manifestarse de forma abrupta y con síntomas intensos. Según especialistas, uno de los signos más comunes es la fiebre alta, superior a los 38 grados, acompañada de escalofríos, sudoración, dolor de cabeza intenso y un marcado malestar general que puede incapacitar al paciente durante varios días.

A estos síntomas se suma la tos seca y persistente, que puede prolongarse incluso dos semanas después de la desaparición de la fiebre, así como dolor de garganta, congestión nasal o goteo constante de la nariz. Muchos pacientes también presentan dolores musculares severos, fatiga extrema y debilidad, lo que retrasa la recuperación completa.

En la mayoría de los casos, la enfermedad evoluciona de manera favorable con reposo, hidratación y cuidados básicos. No obstante, en personas vulnerables (como adultos mayores, niños pequeños, embarazadas y pacientes con enfermedades crónicas) el virus puede derivar en complicaciones como neumonía bacteriana, infecciones del oído o de los senos paranasales, y agravamiento de condiciones preexistentes como asma, diabetes o insuficiencia cardíaca.

¿Está circulando el H3N2 en República Dominicana?

El infectólogo Héctor Balcácer confirmó recientemente que la influenza A H3N2 ya se encuentra circulando en el país y advirtió que la situación podría intensificarse con la llegada masiva de viajeros desde Norteamérica y Europa durante las fiestas navideñas.

Balcácer explicó que las pruebas moleculares realizadas en el territorio dominicano muestran un cambio en el patrón de circulación viral. “Al inicio predominaba el H1N1, pero hemos observado cómo ha ido cambiando hacia H3N2, tal como está ocurriendo en otras partes del mundo”, dijo.

El especialista también alertó sobre el impacto del turismo estacional. “Reconocer que en este momento estamos esperando los viajeros de Estados Unidos, principalmente Canadá y de Europa, donde sabemos que España es el punto de partida principal hacia nuestro territorio, de los visitantes. Lo que quiere haber dicho que todas esas personas que ya están viviendo temperaturas bajo ceros van a llegar con la pinta del 24, el 31, pero también van a llegar con todo eso, mucho muchachito mocoso para que los cuadros de proceso respiratorio, posiblemente se van a incrementar”, explicó.

La posición de Salud Pública

Por su parte, el Ministerio de Salud Pública aseguró que la circulación de virus respiratorios en el país se mantiene dentro del rango esperado para la temporada. La institución reiteró que la vacunación contra la influenza y las medidas preventivas siguen siendo las herramientas más eficaces para evitar casos graves y hospitalizaciones.

De acuerdo con los datos oficiales, el comportamiento de la influenza muestra un patrón estacional típico: baja actividad durante las primeras 20 semanas del año, seguida de un ascenso sostenido desde la semana 23 y un incremento más pronunciado entre las semanas 30 y 38. El mayor número de notificaciones se concentra entre las semanas 39 y 42, con más de 25 casos semanales.

En cuanto a las infecciones respiratorias agudas graves (IRAG), Salud Pública informó que estas se mantienen estables y con baja intensidad en comparación con el año anterior. No obstante, la tasa de letalidad se sitúa en 3.3 %, superior al 1.2 % registrado en 2024.

El organismo explicó que las zonas de mayor densidad poblacional y movilidad registran más casos sospechosos, mientras que las áreas rurales presentan cifras mínimas. También advirtió sobre los riesgos de la automedicación y exhortó a la población a acudir a los servicios de salud ante signos de alarma como fiebre persistente o dificultad respiratoria.

¿Cómo es exactamente el virus H3N2?

Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, existen cuatro tipos de virus de la influenza: A, B, C y D. Los virus de tipo A son los únicos capaces de provocar pandemias y se clasifican en subtipos según dos proteínas de su superficie: la hemaglutinina (H) y la neuraminidasa (N).

Actualmente se conocen 18 subtipos de hemaglutinina y 11 de neuraminidasa, cuya combinación da origen a múltiples cepas. En humanos, los subtipos más comunes son el H1N1 y el H3N2, que a su vez se dividen en clados y subclados. Esta temporada, la variante predominante es la influenza A H3N2, subclado K.

Vigilancia activa y medidas de prevención

Las autoridades sanitarias subrayan que los sistemas de salud cuentan hoy con protocolos para detectar y responder de forma temprana a incrementos de casos, reduciendo el riesgo de brotes descontrolados.

Entre las principales recomendaciones para prevenir la influenza H3N2 se encuentran: mantener una adecuada higiene de manos; cubrirse al toser o estornudar y evitar el contacto cercano si se presentan síntomas; ventilar los espacios cerrados con frecuencia; priorizar la vacunación contra la influenza, especialmente en grupos de riesgo y acudir a un profesional de la salud ante síntomas intensos o persistentes.

Estas medidas, recuerdan los expertos, forman parte de hábitos sencillos pero efectivos que ayudan a disminuir el impacto de la influenza y de otras enfermedades respiratorias que suelen intensificarse durante la temporada navideña.